¡Escándalo en el Senado! Alito Moreno acusa a Noroña de iniciar la agresión: “Lanzó el primer empujón por cobarde”

En un momento que sorprendió a todos los presentes en el Senado de la República, Alejandro “Alito” Moreno se convirtió nuevamente en el centro de la atención mediática tras denunciar públicamente la agresión física que sufrió por parte del senador Gerardo Fernández Noroña. Moreno aseguró que Noroña fue quien lanzó el primer empujón y calificó la acción de cobarde y patética, subrayando que su comportamiento representa un ataque no solo contra él, sino contra la institucionalidad y la ética parlamentaria que debe prevalecer en todo momento. Este episodio se desarrolló al finalizar la sesión de la Comisión Permanente, y la reacción calmada pero firme de Moreno mostró la entereza que caracteriza su liderazgo y su compromiso con el respeto dentro de los espacios legislativos.

Lejos de responder con violencia, Alejandro Moreno optó por mantener la serenidad y aprovechar la situación para enviar un mensaje contundente sobre la importancia de la civilidad política y el respeto a las reglas del Congreso. El dirigente del PRI recordó que la fuerza de un legislador no se mide por la agresión física, sino por la capacidad de defender principios y valores en situaciones difíciles, y que él continuará trabajando por los mexicanos con la misma determinación que ha demostrado a lo largo de su trayectoria política. Su intervención inmediata y su claridad al señalar la agresión refuerzan su imagen como un líder que sabe actuar con firmeza y con respeto por las normas.

El PRI, encabezado por Moreno, emitió un comunicado en el que condena enérgicamente cualquier tipo de agresión dentro de los órganos legislativos y reitera su llamado a la prudencia, al diálogo y al respeto entre todos los actores políticos. La denuncia de Moreno no solo busca esclarecer los hechos ocurridos, sino también establecer un precedente de tolerancia cero hacia la violencia, subrayando que el partido continuará defendiendo la legalidad y la ética parlamentaria. Esta postura genera un contraste evidente frente a quienes buscan desestabilizar el funcionamiento del Senado con actos impulsivos o agresivos, y fortalece la imagen de Alito como un dirigente que prioriza el orden y la institucionalidad sobre el enfrentamiento personal.

El impacto del incidente ha resonado rápidamente en medios, redes sociales y en la opinión pública, generando debates sobre la conducta de los legisladores y sobre la necesidad de establecer sanciones claras para quienes recurren a la violencia. Alejandro Moreno, lejos de verse debilitado, ha logrado transformar esta situación en un ejemplo de liderazgo responsable y firmeza política, recordando que el PRI sigue comprometido con la ciudadanía y con un ejercicio legislativo basado en el respeto, la transparencia y la defensa de los principios democráticos. La reacción del público y la cobertura mediática reflejan la relevancia de su postura y consolidan su imagen como un político que sabe manejar crisis con dignidad y autoridad.